Desde hace unos meses, no pasan más de dos noches que me llame para saber de mí. El telefono movil ahora es gratuito si llamas con la misma compañía por unos minutos determinados; así que me avisa para que me conecte y podamos hablar por un rato. No tenemos webcam. Bueno, yo sí tengo pero no sabe conectarla o los virus no dejan que se pueda conectar. Entrecortada, esa llamada gratuita por la web, sirve para hablar de pisos de alquiler, de vacaciones, del día a día... suelo cenar mientras hablamos.
El sueño puede esperar.
¿Cuál puede ser el mejor regalo de navidad? Quizás su sonrisa. De eso te das cuenta cuando pasas mucho tiempo en su ausencia. El tono de su voz, vivo, gritón, alegre, rotundo, claro... se entremezcla con su risa picaresca.
- Miriam, ¿Te has ido?
- No
- Me ha salido tu foto y la mía
-¿Dónde?
- En una foto de verano, morena, que ibas con un vestido granate. Ya se ha puesto la pantalla en verde. voy a borrar. Al virus lo voy a volver loco y asi se va. jajaj
- jajaja
- He comprado unos turrones... ¿A que no sabes cuales son?
- Pues los de la viuda
- mmm ¿la viuda vuelve para navidad? jajaj no, navidad no. Solo vuelve uno.
-Ahhhhhhh ya sé cual
-¿Cual?
-El Almendro.
-Muy bieeeeeeeeen! ese vuelve a casa por navidad! Ya le tengo cariño cuando estabas en México siempre compro ese.
-Uiii pero ese es muy caro!
-No, si compras cuatro pagas tres. He comprado el que es puro de chocolate del almendro, y el Yema pero el bueno porque hay dos tipos. Así me regalan el bueno.
¿Muy bién no? ¿A qué te gusta ese turrón?(...)
Es mi madre.
Incansable, por suerte.El tono de su voz me acompaña por la noches por un rato; ese rato hace que siga como en casa. Incluso creo que ahora hablamos más que cuando estaba allí. Todavía me sorprendo cuando hace una perdida para que me conecte, como un amig@ más. Ahora la distancia se acorta. Me voy afortuanda con el Almendro a casa por Navidad.